RAMIRO I, PRIMER REY DE ARAGÓN

Ramiro, que ha pasado a la historia como Ramiro I,  fue el primer hijo de Sancho III, pero el rey lo tuvo joven, estando aún soltero, por lo que fue considerado hijo natural no legítimo y por ese motivo no tenía derecho a suceder a su padre como monarca.  Puedes escuchar nuestra versión podcast desde este link.

Sancho se casó por fin con Muniandona, hija del conde de Castilla y tuvo con ella tres hijos más, estos ya si, con derechos patrimoniales: García, Fernando y Gonzalo.

Siendo así, con 3 hermanos legítimos ¿cómo llegó entonces Ramiro a ser el primer rey de Aragón?

Cuentan los cronistas aragoneses que durante una de las expediciones militares del rey Sancho fuera de la corte real en Nájera, el infante García, todavía niño quiso montar el caballo favorito de su padre si su permiso.

La reina, aconsejada por un caballero, no se lo permitió, y el infante enfadado se vengó de su madre acusándola ante su padre el rey, de adulterio.

Los otros dos hermanos menores, instigados por García, apoyaron su acusación y la reina fue encerrada en una torre. Para probar su inocencia o su culpabilidad, se decidió que un caballero defendiese el honor de la reina en la batalla. Según este juicio divino, si la acusación era falsa, el caballero saldría vencedor.

Ante la dificultad de la prueba, ningún caballero se presentó voluntario para batirse por la reina. Solo el joven Ramiro, su hijastro, que había sido educado en la corte paterna y confiaba en su madrastra.

Los 3 infantes comprendieron que su farsa ponía en peligro a su hermanastro y a su madre y decidieron confesar la mentira. Cuando el rey supo la verdad, la reina fue liberada y Ramiro no tuvo que batirse.

En agradecimiento, la reina lo adoptó como hijo propio, y se convirtió así en descendiente legítimo del rey por lo que pudo optar al igual que sus hermanastros, a la herencia territorial del monarca.

A su muerte, el rey concedió a Ramiro el condado de Aragón, que con el tiempo se convirtió en Reino y Ramiro en su primer rey. Pero esto… es otra historia.

Escuchar Aragón Curioso en podcast desde este link